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CARRUSEL: · No están funcionado los abrazos; Caborca: Un criminal abandono


Por Víctor Fausto Silva D.

Pues será el sereno, estimado lector, pero las cuentas no cuadran en materia de seguridad pública.

A lo largo y ancho del país, el presidente López Obrador va y viene inaugurando cuarteles militares y bases de la Guardia Nacional dizque para proteger a la gente, pero a lo largo y ancho del país siguen las matazones con la actuación cada vez más descarada de grupos de delincuentes que con la mano en la cintura toman ciudades enteras.

Durazo: Lo que se

 ve no se juzga


Será cuestión de que los especialistas en la materia le metan lupa al asunto, pero a simple vista, lo que ve el ciudadano común y corriente –atrincherado a media noche en sus casas protegiéndose delas balaceras- es que la política de “abrazos, no balazos”, nomás no está funcionando.

El único que reparte abrazos es el gobierno…y se los reviran a tiros.

¿De qué le sirve a la gente ver los ostentosos despliegues de tropas y guardias nacionales como si fueran exhibiciones en el desfile de la revolución, si cuando se desata el infierno no se ve de ellos ni sus luces?

Caborca acaba de dar el más reciente ejemplo de ello. En un seguimiento casi de transmisión en vivo, Los aterrorizados ciudadanos dieron un seguimiento casi de transmisión en vivo, de que a la plaza entró un convoy de por lo menos 19 camionetas con gente armada, que a lo largo de ¡seis horas! estremecieron a la ciudad a punta de tiros, con muertos y levantones incluidos.

Por ningún lado se vio a la contraparte, ésa que de día desfila con galanura por las calles, pero que una vez disipado el humo de las balaceras sólo aparece para delimitar perímetros con cinta amarilla, a levantar cadáveres, carros y armas abandonados y a contabilizar casquillos percutidos.

Según la vocera de la Secretaría de Seguridad Pública, Alejandra Díaz, las autoridades recibieron el reporte del desastre a las 12:05 de la noche del miércoles….y tomaron cartas en el asunto ¡dos horas después! Un tiempo en el cual, de haberlo querido, los criminales hubieran incendiado toda la ciudad.

¿Cómo entender que la ciudadanía haya tenido una información más oportuna y precisa que la policía municipal, la estatal, el ejército y la Guardia Nacional? ¿Cómo justificar tal parálisis, cuando ésta última tiene un flamante cuartel que apenas en julio del año pasado inauguró López Obrador en Pitiquito, a escasos minutos de distancia de Caborca?

En ese entonces no faltó el rollo demagógico: AMLO dijo que se trataba de “tener estos cuarteles muy cerca de la gente, para proteger a los ciudadanos”

Pues vaya protección. Y vaya coordinación, que tanto presume el gobierno, aunque eso sí, el lenguaje técnico se vuelve cada vez más rebuscado y rimbombante, como para apantallar –y atarantar- a la gente.

Cada vez hablan más bonito. Se alude al “estado de fuerza”, a la “trilogía investigadora” y otras florituras verbales, que harían bien en traducirle a los caborquenses, por ejemplo, todavía con los pelos de punta por la demostración del criminal abandono en el que los dejaron.

Por negligencia o por contubernio, el asunto apesta. Y nadie, de ningún nivel, ha salido a explicar por qué todas las corporaciones se quedaron pasmadas, mientras la ciudad se convertía en campo de batalla.


Allá en Hermosillo, hace buen rato que algunos columnistas están haciendo circular la versión de que el gobernador Alfonso Durazo está calibrando hacer varios cambios en el gabinete, presumiblemente insatisfecho por el desempeño de algunos colaboradores.

María Dolores del 

Río: Puro rollo

No tengo al alcance información cercana y confiable de que así sea, pero con un estado estremecido por la creciente violencia, ya debería voltear hacia la Secretaría de Seguridad Pública, donde María Dolores del Río ha resultado una nulidad.

Si se trataba de pagarle alguna contribución de campaña, hubiera sido preferible enviarla al DIF Estatal o mejor aún, crearle una oficina de relaciones públicas, donde repartiera abrazos y diera rienda suelta a lo que mejor maneja: el rollo demagógico, sobre todo cuando se le llena la boca hablando de que la prioridad es combatir la corrupción.

La señora no ha dado, ni dará, pie con bola en una Secretaría de ese rango, menos cuando los criminales le están quemando el estado, mientras ella encabeza actos rositas firmando convenios de colaboración, en los que, para variar, pronuncia largas peroratas sobre un tema al cual no le entiende ni jota.

Allá sabrá el gobernador Durazo si mueve piezas, cuántas y cuáles, pero en cuanto a seguridad pública, como diría Juan Gabriel cuando le preguntaron sobre su orientación sexual: lo que se ve no se juzga.

Aquí lo que se ve es que la señora no le entiende. Y así no pelará un chango a nalgadas

Orden que reditúa en trabajo


Mayito: trabajo, 

no chismarajos


Como dirían los viejos de pueblo, “la trae volteada” el alcalde Mario “Mayito” Martínez en asuntos de salud, ahora resintiendo la segunda embestida de Covid, aunque afortunadamente leve y con pronóstico de pronta recuperación.

Días atrás pasó por el quirófano, con una cirugía exitosa que forzó a obligado reposo, pero que dio pie a desatar la ociosa rumorología de pasillo.

No pasó nada: el alcalde reapareció y a la par de frenar rumores, puso orden en la casa para que nadie se enredara o perdiera piso y todos se concentraran en las tareas inherentes a su cargo.

Se disipó el chismarajo y ahora los navojoenses pueden constatar que el llamado del “Mayito” a no eludir responsabilidades surtió efecto: las diversas dependencias caminan bien aceitadas, y si bien quedan ciertos rezagos en algunos rubros, se están atendiendo.

Ya los Servicios Públicos muestran otro rostro, atacando, por ejemplo, los basurones clandestinos que a la par de afectar la imagen citadina, terminan generando focos de infección, lo que seguramente agradecen los vecinos afectados.

Igual puede decirse de otras áreas prioritarias, como Oomapasn, donde se mete el acelerador buscando la eficiencia que el anterior gobierno municipal echó por las alcantarillas.

Ni qué decir sobre el pulcro manejo de recursos, pues por Cabildo empezaron a pasar las primeras cuentas de este trienio con el palomeo de los regidores.

Está visto que el orden siempre reditúa en trabajo.

Los navojoenses no esperan ni merecen menos. “Mayito” lo entiende así y seguramente volverá con las pilas recargadas.

Agarra vuelo el MC


Donde están cerrando filas y reclutando elementos valiosos es en el partido Movimiento Ciudadano, que este viernes estrenó formalmente nueva dirigencia en Navojoa, con Eduardo Gaxiola al frente.

De imagen fresca y limpia, “El Chore” vendrá sin duda a inyectar nuevos bríos e ideas en esa organización, empezando porque en su trayectoria trae sanos antecedentes de entrega a causas altruistas, un factor que abona a más presencia y penetración entre los ciudadanos.

Y como se hace camino al andar, Gaxiola ya se sacó de la manga una buena carta, al incorporar a Movimiento Ciudadano a Carlos Quiroz Romo, que llegó a la regiduría como independiente.

“Pilinkito”: A reforzar

 el MC

El “Pilinkito” no necesita presentación, conocidos sus antecedentes como hombre de convicciones y de lucha, cualidades sobradamente demostradas cuando también ocupó una regiduría en el trienio de la nefasta maestra Chayito Quintero, ante quien no se arredró a la hora de cantarle sus verdades y denunciar sus tropelías.

De ahí, Quiroz buscó la alcaldía de forma independiente, lo que por merecida votación lo llevó a repetir en el Cabildo.

Ahora, ya con Gaxiola en el timón, tiene dos regidores: el doctor Felipe Gutiérrez y el “Pilinkito”.

Son gente seria, de trabajo y compromiso.

Debutó bien “El Chore”.

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