Niña de cuatro años de Costa Rica muere tras recibir al menos 47 golpes de su madre y padrastro, le explotó el corazón

Alajuela, Costa Rica.- La ciudad de Alajuela fue testigo de un desgarrador crimen, una pequeña de tan solo cuatro años de edad murió a causa de una brutal golpiza propinada por su propia madre y su padrastro.

La tía abuela de la menor contó para el programa Primer Impacto que las alegrías en la vida de la víctima fueron pocas y eran frecuentes los episodios de violencia por parte de su madre de 36 años y su padrastro de 21.

Él por cierto la trató de ahorcar a ella delante de los chiquitos y estando embarazada de él y nadie llegó ‘vea a su sobrina la trataron de ahorcar’ nadie nos dijo nada” detalló.

Además de los 47 golpes recibidos que le causarían la muerte, las autoridades encontraron más golpes de mucho tiempo atrás que demostraban que la menor era constantemente víctima de abusos por parte de ambos.

35 años de prisión

La Presidenta del Tribunal Penal de Alajuela, Anayancy umaña, dictó una sentencia de 35 años de prisión para Yuseth María Mejías Vargas, madre de la niña, y Brayan Jacob Herrera Ayala, padrastro, por el delito de homicidio calificado en perjuicio de la menor de edad.

El golpe letal que le dieron ustedes fue en su abdomen, que le laceró el hígado, se lo partió en dos y dejó sangre en abdomen, de tal manera que era tanta la sangre que le subió al corazón y el corazón le explotó también” detalló la jueza.

Los familiares de la madre dicen estar sorprendidos tras enterarse del atroz crimen, pues creen que Yuseth era incapaz de atentar en contra de su hija y que vivía bajo constante amenaza por parte de su pareja, “ella era muy amorosa con los hijos” asegura Guillermo Paniagua, tío abuelo de la menor.

Los jueces asegura que la pareja golpeaba constantemente a la menor debido a que su llanto les incomodaba durante las reuniones que hacían en su casa “los golpes que le daban para que se callara y esto era frecuente y normalizado en su familia es que era evidente que la agresión no tenía un fundamento ni lo tendrá nunca, mucho menos justificaría el darle muerte a una persona menor de edad en la forma cruel en que murió” detalló umaña.

La sociedad en general considera poca, en algunos casos justa la sentencia dictada por el fuerte crimen, sin embargo la defensa interpuso una apelación pues consideran que es excesiva.